SPOILER: cómo habrás adivinado por el título, te voy a pedir leyendo. Pero te recomiendo que sigas leyendo, que eso es gratis 😉
Hay países que sólo aparecen en nuestro mapa porque alguien nos los coloca ahi. Algún amigo (o amigo de amigo) cuelga en alguna de sus redes sociales las fotos de sus vacaciones en cualquier país lejano y eso nos permite descubrir de su existencia. Con suerte, si es muy próximo y podemos cuadrar horarios, quedamos para pasar del virtual al real y que nos cuente cómo le ha ido el viaje, descubriéndonos así algo más de ese país hasta ahora desconocido para nosotros.
Eso seguramente es lo que ha pasado con Nepal. Para familia y amigos (cercanos), Nepal ya existía de antes, como el resto de los 194 países del mundo. Con un poco de suerte, a muchos les sonará por estar en la zona del Himalaya y algunos documentales. Cuando hace tres meses estábamos mi padre y yo apunto de empezar el viaje, Nepal apareció en el mapa, ya fuera sólo por saber «a dónde se lleva esta loca a su padre» y «tened cuidado con lo que coméis» Para muchos fuimos, con nuestras crónicas y fotos, la cara visible de este pequeño país y de su gente, que amablemente nos abrió las puertas de su casas.
La mejor forma de conocer un país es con los locales y por ese motivo este viaje nos caló tan hondo. En nuestra breve ruta visitamos Bhaktapur, Nagarkot, Kathmandú y Pokhara, haciendo couchsurfing en la primera y la última.
Eso ha hecho que tras el terremoto, muchos de vosotros me hayáis preguntado por nuestros amigos nepalíes, pues realmente han sido nuestra familia allí. Eola y Bijaya, de Pokhara, enseguida dieron señales de vida a través de Facebook. Casi una semana después del terremoto, conseguí contactar con Krishna, que nos había acogido en nuestra primera noche en el país, invitándonos nada más llegar a una ceremonia familiar, como si fuéramos un miembro más de su enorme família. Me alivió saber que todos estaban bien, pero Krishna me dijo que todo el barrio había sido reducido a escombros.
Bhaktapur, nuestra puerta de entrada al país. Una ciudad patrimonio de la humanidad de la UNESCO. Pasamos todo el sábado visitándola con Krishna, pero esa entrada no existe. Casi como la ciudad. Ironías del destino, quise dejar la entrada para cuando tuviera internet, poder consultar los nombres de los templos que habíamos visitado, con la intención de que ese post pudiera una guía útil para quien visitara la ciudad.
Por ese motivo no la escribí, para que fuera fidedigna. Una guía inexistente de una ciudad derruída por el terremoto. Una de los conjuntos monumentales más importantes del país sepultado bajo las ruinas. Un barrio entero del que sólo 2 de las 36 casas que lo forman pueden reconstruirse, el resto tienen que ir al suelo, según nos ha dicho Krishna. Nadie vive ya en el centro histórico de la ciudad y la gente tiene miedo.
Se hace muy raro pensar que sólo hace dos meses tú estabas en esa plaza, charlando con uno de los habitantes, orgulloso de mostrarnos la ciudad. El terremoto se ha llevado muchas vidas y gran parte del patrimonio histórico (que atraía turismo al país). Pero los que se han quedado tienen una larga y dura tarea por delante: rehacer sus casas e intentar volver a la normalidad lo antes posible. Quiero recordar que estando en Nepal nosotros ya experimentamos lo que es estar sin luz durante muchas horas o sólo poder beber agua embotellada. Eso forma parte del día a día de los nepalies. Así que imaginad las condiciones en una situación de emergencia como la que están viviendo.
Y es por ese motivo que escribo este post, para pedir donaciones para Nepal. Mi padre y yo no podemos quedarnos de brazos cruzados cuando recibimos tanto. Y por eso he abierto una cuenta en Evobanco, para transferir dinero directamente a Krishna. El dinero que recaude no irá a ninguna ONG, sino a una família y sus vecinos que lo han perdido todo. En todo momento será un proceso transparente, para quién quiera pedirme los datos. Realizaré la transferencia a Nepal el 31 de mayo.
SARA TERRONES MÄHR
EVOBANCO — ES24 0239 2055 3130 4004 4899
Os agradecería si pudierais compartir este mensaje con vuestros conocidos, porque todo suma. ¡Para que Nepal vuelva pronto a ser un país de sonrisas!