Es hablar de Italia y a nuestra mente vienen, de forma inevitable, ciudades como Roma, Torino o Milán. Parece que el resto del país no existe. ¡Error! Aunque el listón está muy alto, hay vida más allá de las ciudades más importantes. En este artículo te vamos a hablar de una de las regiones que se está poniendo más de moda, y vamos a darte varias razones para visitar la Puglia, en la puntita del talón de la bota.
CONSEJO: dado que Trenitalia tiene un funcionamiento errático similar al de la Renfe española, la mejor forma de recorrer la Puglia es con un coche de alquiler. Aquí puedes encontrar los mejores precios.
Así que ponte un calzado cómodo y ropa con elástico, que la llenarás con la maravillosa gastronomía italiana, y acompáñanos en este viaje por una de las regiones más bonitas de Italia. Te aconsejo que no te saltes ninguna parte de este post, en especial la dedicada a los artesanos.
En este post encontrarás
Bari y su vibrante centro histórico
Bari es de esas ciudades que engañan a primera vista. El trayecto desde el aeropuerto hasta el centro no parece que sea una ciudad que tenga demasiado que ofrecer, ya que pasa por los polígonos industriales y por barrios bastante populares. Sin embargo, el corazón vibrante de Bari late en su centro histórico, un laberinto de calles empedradas, plazas encantadoras y edificios centenarios que cuentan la historia milenaria de la ciudad. Para conocer sus secretos, puedes hacer un tour privado por Bari con guía en español.
De hecho el centro histórico de Bari me recordó bastante a Dubrovnik, por el hecho de que tiene calles muy blancas y en los edificios se utiliza una piedra muy blanca, que ciega al mirarla bajo el sol. El casco antiguo de Bari, conocido como «Bari Vecchia», es un verdadero tesoro lleno de autenticidad y encanto. Al caminar por sus estrechas calles, así sin rumbo, me dio la sensación de que es una ciudad dónde la gente hace vida en la calle. Muchas casas tenían las puertas abiertas de par en par, ropa tendida en los balcones y la gente sentada en corrillo en la puerta, como aún sucede en algunos pueblos españoles.
Una visita obligada es la Basílica de San Nicolás, un magnífico edificio religioso que alberga las reliquias del santo patrón de la ciudad. Sus cúpulas ornamentadas y su impresionante fachada te dejarán sin aliento. En el interior, podrás admirar impresionantes frescos y detalles arquitectónicos que te transportarán a otra época. Una de las cosas que me llamó más la atención es que alrededor de la basílica de San Nicolás, hay como pequeños altares en las calles con imágenes del santo ofrendas y flores que eso pues es algo que que no vemos en en otras ciudades.
Otro punto destacado es la Catedral de San Sabino, un majestuoso ejemplo de arquitectura románica, construida en el s XII sobre los muros de la catedral destruida bizantina. Esta imponente iglesia se alza en medio del centro histórico y sus altas torres y rosetones te cautivarán desde el primer momento. Explora su interior y maravíllate con sus elegantes columnas, suelos de mosaico y la atmosfera sagrada que se respira en cada rincón.
A medida que avances por las estrechas callejuelas, descubrirás pequeñas plazas llenas de vida, como la Piazza del Ferrarese y la Piazza Mercantile. Aquí podrás sentarte en una de las acogedoras terrazas y disfrutar de un café italiano mientras observas el bullicio de la ciudad.
Le“signore delle orecchiette”
Pero si hay algo que realmente llama la atención mientras al pasear por Bari Vecchia es encontrar a las señoras de las orecchiette, o las señoras que hacen pasta de forma manual en algunas esquinas de la ciudad. Un empeño que antaño se limitaba más a los domingos que a otra cosa, pero que en los últimos años se ha convertido en una ocupación diaria, dado el auge del turismo que atrae a mucha gente a visitar el centro histórico de Bari. Y no es para menos, pues verlas en plena faena es hipnotizante. Rebosante de masa y taralli, aparece el telar: la típica mesita con un armazón de madera en el que se encastra un secador que sirve para dejar pasar el aire y secar la masa.
Si quieres llevarte un souvenir a casa, sin duda aprovecha para comprarselo a ellas, la bolsa de 1kg son 5€.
Los pueblos pintorescos de la Puglia
Instagram (¡cómo no!) ha puesto de moda la región de la Puglia, sobre todo por sus preciosos pueblos, encabezado por Alberobello. Al pensar en la Puglia, hay una imagen muy clara que se nos viene a la cabeza: un trullo. Igual por este nombre no te suena, pero seguro que has visto unas construcciones de piedra blanca con tejado negro, muy características.
Alberobello, el pueblo más bonito de Italia
¿Te suenan? Este pueblo es famoso por sus «trulli», singulares construcciones de piedra con techos cónicos que parecen sacados de un cuento de hadas. Alberobello es un Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, por la gran cantidad de estos edificios. Cuenta la leyenda que estas construcciones no tienen mortero, porque en caso de venir el terrateniente a cobrar por terreno usado, podían derruirlos estirando solo de una piedra. Seguro que es una de las cosas que explican en la visita guiada por Alberobello.
Actualmente muchos de ellos sirven como alojamiento turístico o tiendas, con más o menos gracia. Algunos acogen talleres reales de artesanos, y otros son tiendas de souvenirs made in China. No sé cómo lo hacemos, pero tenemos la capacidad de cargarnos todo aquello que es bonito, y el pueblo se ha convertido así en una especie de parque temático.
Como todo pueblo imprescindible a visitar en Puglia, ha muerto de éxito y a media mañana ya es imposible andar tranquilamente por sus calles (¡no quiero pensar en los vecinos!). Eso sí, es indiscutible que bonito es un rato.
¿Cuál es la clave? Madrugar bastante, para asi evitar a los grupos de cruceristas.
CONSEJO: si no te apetece madrugar para tener la ciudad para ti sola, puedes alojarte en un trulli en Alberobello. Échale un ojo aquí
Otro consejo es dirigirse hacia la derecha del parking, o hacia la iglesia de Santa Lucia, desde dónde se tienen buenas vistas del pueblo y es posible encontrar algunos trulli menos masificados. También es posible subir a las azoteas de algunos negocios, y tener así otro punto de vista de la ciudad.
Seguro te has fijado en los símbolos del tejado. Las temáticas son muy variadas, desde símbolos paganos primitivos, pasando por elementos cristianos (que fueron sustituyendo a los paganos), por otros «mágicos» o basados en supersticiones, hasta referentes a la mitología griega o romana. Por este motivo podemos distinguir elementos astrales como la luna o el sol, animales como águilas, caballos, bueyes, perros o serpientes, cristianos como cruces o anatómicos como corazones. De todas formas muchos de los símbolos parecen relacionarse con elementos de protección contra la mala suerte, o de advocación.
La ciudad blanca de Ostuni
Mi conocimiento de la Puglia antes de visitarla se reducía a haber escuchado hablar de Alberobello. Ostuni es uno de esos pueblos que está ganando popularidad recientemente, y es conocido como la ciudad blanca. ¿Adivináis por qué? Al acercarte a la ciudad, quedarás maravillado por sus brillantes fachadas blancas que se destacan contra el cielo azul, o negro, como en nuestro caso.
Las estrechas calles y callejones serpenteantes te llevarán a plazas llenas de vida y a impresionantes miradores que ofrecen vistas panorámicas del campo circundante y el mar Adriático. Hay quien la compara, en un ataque de grandeza, con alguna localidad de las islas griegas. El color blanco de sus paredes se debe a que los habitantes las cubrieron de cal para evitar epidemias.
Sin duda, uno de los puntos más interesantes de la ciudad es su catedral, con una curiosa fachada tardogótica simétrica. y un gran rosetón. Para adaptar la ciudad y sus cuestas a los turistas, han proliferado los vehículos tradicionales APE reconvertidos a transporte turístico. Son eléctricos y silenciosos, así que ándate con cuidado para que no te atropellen.
Santa María di Luca
El sur del sur; el punto más extremo del tacón de Italia, allí dónde se juntan el mar Jónico y el Adriático. El único lugar donde sin moverte puedes disfrutar de un amanecer y atardecer en el mar. El fisterra italiano.
Sin duda el mayor atractivo está en la Basílica de Santa María de Finibus Terrae, que tiene cierto aire a Montserrat, y que debido a su posición expuesta y de defensa, no sabrías decir a primera vista si se trata de una fortaleza o de una iglesia. Y a su lado, el faro, que durante muchos años ha guiado a los marineros en su paso por el Mediterráneo.
Una vez bajas al pueblo, te sorprenderá pasear por el centro, rodeado de edificios un tanto eclécticos y modernistas, que en su momento fueron residencias de la gente noble. Esto se nota en el paseo marítimo, que tiene unas curiosas construcciones a pie de agua, una especie de torres sin suelo en la que los ricos entraban para bañarse en la intimidad.
Lecce, la Florencia del sur
Pensar que en Italia todo son ruinas romanas es un error. Lecce es conocida como la Florencia del sur, con una rica historia y un impresionante patrimonio barroco.
Y aunque parezca una contradicción con el párrafo anterior, nos recibe el amfiteatro romano del siglo II, parcialmente sepultado por la plaza. Las comparaciones son odiosas, y habiendo visto los grandes iconos italianos, puede saber a poco. Se descubrió por casualidad en 1905.
Si buscas magnificiencia, la solución es andar un poco más y adentrarte hacia el centro de la ciudad. Sin ser yo una gran fan del barroco, la fachada de la Santa Cruz te deja sin palabras, la mires por dónde la mires. Sin duda, es ideal ir con guía oficial , para conocer todos los entresijos de este maravilloso edificio. Nosotros contamos con el gran Giovani, y fue una visita muy interesante. De visitarla por libre no habría sido posible saber que los artesanos escondieron sus caras en las flores de la fachada, que hay referencias a la batalla de Lepanto o que fueron necesarios 100 años de construcción.
Seguramente si estás buscando información para visitar la Puglia, hayas encontrado alguna lista de pueblos que ver en la Puglia encabezada por Monopoli, Cisternino, Gallipoli o Polignano a Mare, colgando sobre el acantilado. El objetivo de este blogtrip de Puglia Promozione era visitar zonas menos conocidas de Puglia, por eso no aparecen en este artículo. Si te apetece, puedes visitarlos con esta excursión.
Una vez hayas saciado tu apetito cultural en Lecce, contenta a tu estómago probando los pasticciottos, los dulces típicos rellenos de crema, nacidos en 1745, prácticamente de un error.
Actividades al aire libre en Puglia
Pese a que Puglia se ha hecho famosa en los últimos años por sus pueblos, queremos destacar que durante tu visita al talón de Italia puedes hacer un montón de actividades al aire libre. Y de hecho, ese era el título y la temática de nuestro viaje: visitar la Puglia más natural y salvaje.
Reservas naturales en Puglia
Una de las actividades más sostenibles que se pueden hacer en la Puglia es conocer sus reservas naturales
Reserva natural y área marina protegida de Torre Guaceto
Tras recorrer una carretera rodeada de olivos, llegamos a la entrada de la reserva de Torre Guaceto. El transito está prohibido y se puede visitar a pie o en bicicleta, ya que se trata de una zona de humedales, hogar de multiples especies de aves migratorias. El paseo es muy fácil, prácticamente sin desniveles, y la guía de Cooperativa Thalassia nos iba explicando con todo lujo de detalles, ayudada por la maleta mágica. Llegamos a la laguna dónde desembocan los ríos de la zona, en una unión de agua dulce y salada. lugar de union de agua dulce y salada, donde se reproducen los peces. Cuenta la leyenda que si pides un deseo, el agua dalada se lo da a la salada. A los peces, y ellos al saltar se lo dan a la luna. La laguna tiene un azul turquesa que incluso, en un día nublado como el que nos tocó a nosotros, te deja con la boca abierta.
En lo alto, la Torre Guaceto, símbolo de la reserva, y protección.Torre Guaceto o Gausiti, como se la conoce antiguamente, está presente desde el siglo XII en la cartografía y desde el siglo XIX en la literatura histórico-geográfica de Mavaro, Marciano, Profilo, Arditi, De Giorgi y en fuentes documentales de diversa procedencia. La zona de Torre Guaceto se considera especialmente valiosa por la presencia de agua dulce en las proximidades, la posibilidad de desembarco y su conformación fácilmente defendible gracias a una vasta marisma que divide el promontorio de tierra firme. El geógrafo musulmán Edrisi se refiere a la zona en 1164 en su libro Il sollazzo per chi si dillazzo di girare il mondo, «Gaw sit», de la raíz «gau», agua dulce, y «wadi», río, canal, curso de agua. Algunos siglos más tarde, monseñor Giovanni Carlo Bovio, arzobispo de Brindisi, llamó a este lugar y a su rada «Saracinopoli seu Guascito» con ocasión de su visita pastoral en 1566, atestiguando así una presencia árabe en la zona.
Teníamos que hacer snorkel, pero como el día no acompañaba, nos enseñaron las especies y fuimos al centro de recuperación de tortugas marinas.
Torre Guaceto es un ejemplo de pesca sostenible. A principios de los 2000, cuando se convirtió en reserva, se prohibió pescar. Los pescadores de la zona se echaron las manos a la cabeza, sin embargo, tras 5 años, la zona pudo regenerarse y ahora mismo son ellos los que encabezan proyectos de pesca sostenible.
Riserva Oasi Le Cesine
Un poco más al sur encontramos la riserva oasi le Cesine, que únicamente se puede visitar en visita guiada con un biólogo de la WWW. Se trata de una de las marismas mejor preservadas y constituye uno de los últimos tramos supervivientes de las vastas marismas que se extendían entre Brindisi y Otranto.
En su conjunto, la Reserva consta de varios ambientes: la duna, la zona pantanosa, la marisma, el bosque, el matorral y la zona cultivada. Aquí también se estudian y recuperan tortugas, pero sobretodo es muy apreciada por ser zona de descanso de las aves migratorias. Por ese motivo hay diversos hides desde dónde se pueden observar éstas.
Hicimos la visita con Paolo, y su ritmo lento y apasionado hace que la vida de las libélulas te merezca toda tu atención. Pese a que no se puede visitar por libre, hay caminos marcados.
Recorrer el valle de Itria en bicicleta
En su día acueducto de Pugliafue la mayor obra hidráulica de Europa, pero hoy en día ha sido convertido en una ciclovía (similar a las vias verdes que hay en España) que ofrece la oportunidad de admirar los paisajes más bellos del Valle de Itria rodeados de olivares, viñedos y antiguos trulli.
No hace que te pongas el maillot ciclista para recorrer el valle de Itria en bicicleta, pues practicamente no hay desnivel. Si como nosotros realizas esta actividad nada más llegar a la Puglia, querrás pararte a fotografiar todos los trulli que veas (ya te aviso que son muchos). ¡Tomátelo con calma y disfruta del trayecto de unos 6km aproximadamente. Nosotros hicimos la ruta con Puglia Cycle Tours, que disponen de tours autoguiados en bicicleta pero también de rutas que permiten dormir en los trulli del valle.
Aunque esto signifique empezar la ruta algo después de comer, sin duda te recomiendo hacerla coincidir con la hora dorada, prácticamente al atardecer, cuando los campos de trigo se ponen sus mejores galas.
Visitar en barco las cuevas cársticas
El mar y yo no somos buenos amigos, especialmente cuando se trata de navegar. Pero no hay nada que no solucionen drogas blandas. Así que con una biodramina en vena y un horizonte que amenaza tormenta, nos embarcamos con la tripulación de Minerva Noleggio en una excursión que nos llevará a ver las cuevas cársticas que hay entre Castro y Santa Cesarea di Terme, que nada tienen que envidiar a la famosa grotta azzurra de Capri.
Tras entrar en las diversas cuevas, el barco hace una parada en la preciosa playa de los 100 escalones (¿a que no sabéis el por qué de este nombre?), con un pequeño aperitivo, que para los que nos mareamos en una colchoneta en una piscina es una auténtica tortura.
Si tenéis tiempo, os aconsejo pasear por el casco antiguo de Castro y admirar el color de las aguas de las playas urbanas.
Playas de Puglia
Si bien la Puglia se ha hecho famosa por sus playas de color turquesa, con zonas que se han ganado el sobrenombre (marketiniano) de Las Maldivas de Salento, hay un melón que merece ser abierto: playas públicas versus playas privadas.
La mayoría de playas que visitamos en Puglia son playas privatizadas, es decir: puedes acceder libremente pero no hay espacio para poner la toalla, ya que todo está ocupado por hileras infinitas de tumbonas y sombrillas a juego, o incluso gazebos o pérgolas con cortinas y tumbonas dignas de un beach club de Ibiza. Y obviamente, el alquiler no es barato, en algún lugar llegué a ver 80€ por estar el día entero en la pérgola.
Desconozco la ley de costas italiana y hasta qué punto es eso legal, ya que hay algunas playas que son únicamente para los huéspedes del hotel, como en el caso del hotel Mon Rêve Resort en el que nos alojamos.
Como enamorada de la Costa Brava, me encantan las playas salvajes y carentes de servicios, como la cala Acquaviva. De estas también hay en Puglia, aunque sean más difíciles de encontrar. Pero cuando llegas… ¡Mamma mía, che bellezza!
Y tú, ¿qué tipo de playa prefieres? ¿Cuánto estarías dispuesta a pagar por pasar el día en la playa?
Descubrir los artesanos de Puglia
Si abría el artículo hablando de las señoras que hacen pasta de forma artesanal en Bari, lo cierro con la parte más humana del viaje. Al igual que en la ruta 66 , el coincidir con artesanos y charlar sobre su día a día le da un punto muy especial.
La técnica del papel maché
El arte del papel maché en Lecce, un fenómeno único en Puglia, se remonta a un periodo entre los siglos XVII y XVIII, cuando el desarrollo de las artes estaba ligado al creciente número de iglesias y monumentos.
En esa época, los artesanos de Lecce descubrieron que el arte de «plastificar» el papel les permitía crear innumerables obras sagradas para ayudar a convocar a los fieles de nuevo al culto cuando la Iglesia de la Contrarreforma estaba inmersa en su cruzada contra la herejía luterana. Los artesanos no tenían acceso a materiales preciosos, por lo que se veían obligados a utilizar otros más pobres, como paja, trapos, cola y yeso.
La necesidad de inventar nuevas formas de acercar a los creyentes a la Iglesia dio lugar a una amplia selección de motivos decorativos tomados de la realidad y adoptados por los canteros, que creaban ilusiones en piedra, y los magos de papel, que utilizaban el papel maché.
Visitar un taller de papel maché es como leer un cuento insólito y fantástico sobre un material humilde que poco a poco se fue haciendo cada vez más valioso y único.
Podría decirse que una estatua se crea de la nada, o que es la expresión de una idea. Todo comienza con un manojo de paja rizada, modelada retorciéndola en cordel, dando una forma tosca a un núcleo de hierro hilado. Y eso es lo que vimos gracias a María en uno de los talleres que siguen abiertos, La Casa dell’Artigianato Leccese. Y siguen produciendo figuras tradicionales, no se han dejado comprar por los souvenires baratos.
La cerámica de Grottaglie
La sorpresa del viaje. Si bien antes de visitar la Puglia había oído hablar de algunos de sus pueblos más famosos, nunca había escuchado Grottaglie. De hecho, no estaba en el planning. Pero tuvimos que cancelar la salida de avistamiento de delfines por mal tiempo, así que nuestro guía pensó que visitar Grottaglie, la localidad famosa por su cerámica, sería una buena idea y que nos podía gustar. ¡Menudo acierto!
Todo lo que nos había dicho es que conoceríamos a un señor muy especial, un buen amigo, un hombre que profesaba un amor incríble hacia su mujer. Si hubiéramos estado en otro país, hubiese pensado que nos llevaría al taller de un amigo para que comprasemos algo, por lo bien que nos habló de él. Y nos encontramos ante una gran puerta cerrada, en frente de casa Vestita.
Recibidos por el maestro Cosimo Vestita, propietario de la Casa del mismo nombre, nos adentramos en este lugar de atmósfera evocadora e iniciamos este extraordinario viaje en el tiempo hecho de cultura, artesanía, historia, naturaleza e incluso religión y sueños. Cosimo es un ceramista apasionado de la arqueología que llegó a esta casa por casualidad (o destino), y que al ir a excavar una de las alas para hacerle un regalo a su mujer, encontró restos romanos. Quizás lo más alucinante no sea la casualidad, sino escuchar la historia de su propia boca. Y abre una puerta hacia un antiguo horno, que escondía una iglesia medieval repuestre que salió a la luz en 2008.
Visitar la casa es una maravilla, e imagino que para un amante de la arqueología todavía más. Pero lo que de verdad hace única la visita es el relato de Mimmo, ya que lo cuenta con verdadera emoción, aunque haya ya perdido la cuenta de cuántas veces lo ha hecho. Podéis contactar con él a través del Facebook de la casa.
Posteriormente subimos a su taller, situado en una de las calles altas de Grottaglie. La entrada a los talleres es gratuita, y ahi se pueden comprar piezas directamente al artesano. Tras conocer la historia de la casa, visitar el taller es como entrar directo a la cabeza del genio: diseños colgando, miles de piezas y colores para dar rienda suelta a la creatividad del artista. Piezas únicas, souvenirs reales que no son hechos en China. Demasiado frágiles para llevar en mi abultada mochila de equipaje de mano.
Subimos a la azotea, dónde seguimos charlando y nos explica una tradición vinculada a ciertas piezas de cerámica.
¡Desde la azotea se tienen las mejores vistas del atardecer en Grottaglie!
Espero que estos puntos te ayuden a organizar tu itinerario por la región de Puglia. Si conoces alguno más, déjamelo en comentarios.
Sígueme en redes sociales para no perderte ningún viaje.
